Nicaragua, el segundo país más pobre de América Latina tras Haití, vive sumida en apasionadas discusiones políticas por las sospechas de fraude electoral en las pasadas elecciones municipales de noviembre. Al hablar de crisis en Nicaragua, todo el mundo piensa en esa crisis, pero cuando se pregunta un poco más aparecen ya la crisis de los precios de los alimentos y la de la energía que trajeron 2007 y 2008 al país, con algunos efectos nocivos.
Más difícil resulta encontrar los impactos directos de la actual crisis económica mundial. Hay quienes dicen que siendo tan pobres ya no pueden empeorar y otros que hablan de que al estar al margen del sistema internacional no se va a sentir ese impacto.
Otros señalan que su distancia de los mercados mundiales les hace inmunes. Pero las cifras no engañan: el crecimiento será menor que cero en 2009 según las previsiones más ajustadas, ha habido recortes presupuestarios derivados de ingresos menores a los previstos en materia de salud y educación, y la llegada de remesas en el mejor de los casos se ha estancado.
En el campo el dibujo es más complejo: el encarecimiento de los insumos productivos ha hecho más difícil recuperar sus inversiones a los pequeños productores y ello ha aumentado la tasa de morosidad de muchas cooperativas productoras rurales. En el medio urbano, se han cerrado un número significativo de maquilas, dejando a más de 30.000 mujeres sin empleo –en un país de 5.1 millones de habitantes, con una población activa de 2,3 millones, y desempleo y subempleo cercano al 30% - y las remesas, según cifras oficiales, se han estancado –aunque las grandes remesadoras reportan descensos del 13% en los envíos que canalizan- teniendo en cuenta que dos tercios de la familias nicaragüenses reciben en alguna medida el impacto beneficioso de su llegada.
Algunos impactos iniciales incluyen un empobrecimiento en el entorno rural y urbano, menor producción agraria por falta de financiación, menores exportaciones -y trabajo asociado- de manufacturas y alimentos, un repunte de problemas nutricionales, signos del aumento del abandono escolar y un aumento de la delincuencia en el país más seguro de Centroamérica.
Jaime Atienza (desde Nicaragua)
La pobreza y la desigualdad son problemas complejos, pero no inevitables. Una sociedad bien informada puede provocar la transformación económica y política que pondrá fin a la pobreza. Este blog, elaborado por el área de investigaciones de Intermón Oxfam, quiere contribuir a ese debate: proponer reflexiones e ideas sobre la globalización y el desarrollo, y escuchar lo que otros tienen que decir.
lunes, 29 de junio de 2009
Cómo llega la crisis a los más pobres en Nicaragua
Etiquetas:
Centroamérica,
Crisis
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1 comentario:
A Ariane Arpa de Intermom, y al resto de las ongs participantes de la campaña SOMOS, se le debería caer la cara de verguenza por aceptar el patrocinio del Banco Santander para dicha campaña. Rompiendo con todo tipo de coherencia, esta hipócrita de Ariane Arpa, supongo que puesta a dedo en la dirección de Intermom, aun a sabiendas de que muchos colaboradores de base estábamos en contra de esta alianza con los depredadores que empobrecen el mundo, antidemocráticamente ha decidido escuchar antes a las migajas de Botín que a la de los afiliados que le pagamos su nada despreciable sueldo.
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